Kamakura es una ciudad de unos 200.000 hab. situada a 1 hora de Tokio. Fue capital de Japón entre los siglos XII y XIV. En ella los templos budistas conviven con los santuarios sintoistas. Destaca el Daibutsu o Gran Buda, una escultura de 13 metros de altura y 93 toneladas de peso que es venerada con gran devoción. La belleza y lo insólito se dan la mano en esta ciudad.
Bosque de bambú
Buda infantil con el tamaño preciso para que los peques lo abracen
Cementerio
Quiromántico trajeado